Entre surcos de vinilo y vermú. Episodio 19: The Easybeats. Australianos por el mundo.

pop • feb. 15, 2022

En apenas dos años, Australia se les había quedado pequeña a los Easybeats. Los discos de grupos ingleses como los Beatles o los Kinks solían ocupar los puestos altos de las listas de éxitos australianas, pero los Easybeats eran la contrapartida local acumulando números uno y haciendo fan del grupo a medio país.

Al tercer disco publicado, el grupo se calienta tras unas cervezas y comentan "no hay huevos de irse a Inglaterra". Dicho y hecho. Los Easybeats serían el primer grupo australiano que cruzaría océanos y continentes para intentar triunfar en Londres, que para el año 66 se había convertido indudablemente en la capital del pop.

Al aterrizar en tierras inglesas el grupo, siendo unas estrellas en su país, no iban a estar trabajándose el éxito desde cero. Establecen un plan que incluye ver conciertos en Londres, relacionarse con la escena local, comprar trajes a medida y componer nuevas canciones que registrarían con la producción de Shel Talmy. Cuando llega la hora de presentarlas lo hacen en un concierto junto a los Four Tops en el Saville Theatre con lo más granado del periodismo observando con atención.

Lo petan. Friday on My Mind, la canción que lanzan como single alcanza el número dos en Inglaterra, número uno en Holanda, puestos altos en EE.UU. y otro número uno más en Australia convirtiéndolos en los primeros aussies en triunfar fuera de su país, abriendo el camino para que el grupo del hermano pequeño de George Young, unos tales AC/DC se convirtieran en patrimonio cultural de la humanidad.

En el programa de la semana reconstruimos los pasos de los Easybeats hasta Friday on My Mind escuchando las siguientes canciones: